- Silenciosa:
nace del miedo actuar y se traduce en una conducta de reclusión en sí mismo, en la cual el adolescente adopta una postura de protesta muda y pasiva contra todo.
- Agresiva:
A diferencia de la anterior se expresa de manera fuerte ya sea verbal, gestual, golpes, rechaza las normas y suele perder el control de sus emociones.
- En contra las Normas de la Sociedad:
Se da por egoísmo o utilidad propia, o por el simple placer de no observarlas.